El ajuste a las provincias cubre solo una fracción del objetivo fiscal de Caputo
La consultora LCG revela que el recorte total de fondos a las provincias abarca apenas el 20 % de los 5 puntos de ajuste buscados por Caputo, planteando interrogantes sobre la estrategia fiscal del gobierno.
El presidente Javier Milei ha optado por aplicar un recorte del gasto público equivalente al 1.5 % del PBI en las provincias, tras el fracaso de la ley ómnibus.
Este ajuste se implementa congelando partidas presupuestarias y frenando transferencias de fondos compensatorios.
Aunque Milei justifica esta medida como una necesidad de que las provincias asuman su parte del ajuste, un informe de la consultora LCG señala que este recorte provincial apenas contribuiría con un 20 % de los 5 puntos de ajuste buscados. El estudio de LCG destaca que la falta de aprobación del Presupuesto para 2024 permite al Gobierno mantener créditos nominales del año anterior y reajustar partidas con cierta independencia.
Esto, sumado a la reducción de la participación de las provincias en la recaudación nacional debido al aumento de los recursos tributarios no coparticipados, como los derechos de exportación y el Impuesto PAIS, plantea un panorama complejo para las finanzas provinciales.
Mientras el Gobierno busca que las provincias contribuyan al ajuste fiscal, la magnitud del impacto real en términos de déficit es limitada, según el informe de LCG.
La combinación de la falta de un nuevo Presupuesto, el reajuste discrecional de partidas y la disminución de la participación provincial en la recaudación nacional plantea desafíos significativos para las finanzas provinciales en el actual contexto económico.