La habrían subido a un auto a los golpes, pero no quiso hacer la denuncia
Un gran revuelo se generó cuando vecinos llamaron a la policía, porque habían visto que en la intersección de Avenida Monseñor Tavella y General Medina, una mujer �Sfue subida a los golpes a un automóvil⬝, asimismo esto fue publicado en Facebook alertando a todos por un secuestro.
Pues tras la investigación supimos que se trató de una situación de violencia en contexto familiar y no hay denuncia.
A las 10 horas aproximadamente la policía de la Comisaría Cuarta recibió un alerta por un supuesto secuestro. De inmediato comenzó un operativo de búsqueda del vehículo, teniendo en cuenta las descripciones que aportaron dos testigos circunstanciales de 24 y 30 años.
Ellos manifestaron a las autoridades que, �Sdos hombres habían tomado a golpes a una mujer que se hallaba en el interior de un automóvil de color azul; y que ante su intervención se habían dado a la fuga⬝.
Personal de la comisaría a la par de la División de Investigaciones, realizaron un relevamiento de cámaras de seguridad en las inmediaciones. Fue así que establecieron que el vehículo en cuestión era un Volkswagen Golf color azul. Luego de consultar el Registro de la Propiedad del Automotor se supo que el auto había sido vendido 4 veces y no tenía las correspondientes transferencias, lo que dificultó la búsqueda.
Sin embargo llegaron a saber que ese auto había sido vendido en la zona de Villa Zorraquín. Solo con ese dato, continuó la búsqueda. Interceptaron el vehículo en Avenida Monseñor Rösch y Las Palmas.
En la entrevista la mujer confirmó que sí habían tenido una discusión �Ssubida de tono⬝ con un intercambio de golpes con su pareja, pero que �Sno había sido para tanto⬝, según sus palabras. Expuso que era un problema familiar y no quiso interponer una denuncia. En el vehículo viajaban su esposo (49 años), el hijo de ambos (24 años) y ella (42 años).
Tomó intervención Fiscalía a cargo de la Dra. Julia Rivoira; Fiscalía de Género a cargo de la Dra. Fonseca y Sec. Juzgado de familia a cargo de la Dra. Ortiz, quienes dispusieron las medidas de rigor. Sin embargo, ya que la señora no quiere denunciar, mientras no haya testigos que lo hagan formalmente y/o pruebas fílmicas, es difícil que se lo trate como violencia de género.