Amigos, simplemente amigos
Mañana celebraremos el día en que deseamos estar cerca de esa persona, a quien llegamos incluso a abrirle nuestro corazón. Confiarle nuestros secretos y compartir nuestros problemas. Sí, es el Amigo o la Amiga.
Es el ser, que en un mundo difícil, descreído y egoísta resiste el deseo de compartir la vida con otro, sentirse acompañado, confiando en que ese sentimiento llamado amistad, que los une será para siempre.
Son muchas las maneras de definir a un amigo; Don Atahualpa Yupanqui decía con sabiduría que “AMIGO ES UNO MISMO EN EL CUERO DE OTRO”. Llegó a esta conclusión luego de trotar y trotar en soledad caminos infinitos.
Al amigo necesitamos siempre, es aquel que cundo niño jugábamos junto, y me defendía cuando algún grandulón quería pegarme. El mismo, que cuando adolescente me “hacía gancho” cuando no me animaba a acercarme a la chica que me gustaba. Y cuando jóvenes hablábamos largo rato, al aire libre, sin que el frío lograra callarnos. A veces éramos un grupo sentado en la plaza, compartiendo nuevas experiencias algunas verdaderas, otras inventadas.
Claro, no existían computadoras que inventaran “amigos virtuales” con quienes no nos podemos dar un cálido apretón de mano o un abrazo que nos fortalece, nos consuela y nos asegura que está y estará siempre a nuestro lado. O celulares que desarmaron las viejas e interminables charlas de la esquina de casa, e incluso que nos miremos a los ojos cuando hablamos, porque ese aparatito indiscreto y frío atrae nuestra atención y malgasta nuestro tiempo, ese que debiéramos entregar por completo a ese amigo que sincronizó los latidos de su corazón con el nuestro, para disfrutar de ese momento.
Esto último no es un reproche, sino una invitación a reflexionar, y darle el valor humano y divino que tiene nuestro amigo o amiga. Porque Dios mismo bendice la amistad.
Cuando falta la amistad entre los pueblos, miremos cuanta guerra, cuánto dolor hay en e el mundo; cuando falta la amistad social en una nación, en un país, cuanta injusticia, cuanto sufrimiento debe soportar el pueblo.
La amistad es un Don de Dios dado a los hombres para que la cuidemos, la valoremos y podamos ser felices. ¡Cuidémosla!
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