El extractivismo en Argentina es la explotación indiscriminada de los recursos naturales para exportarlos. Este modelo económico se puede observar en la minería, el petróleo, la agricultura y la pesca. “Necesitamos repensar nuestros modelos de desarrollo, nuestras formas de vincularnos con los territorios, esa es la clave para poder juntar justicia social con justicia ecológica, que es el gran objetivo que tenemos”, dijo Enrique Viale, fundador de la Asociación Argentina de Abogados Ambientalistas (Aadeaa).
Al igual que en otros países latinoamericanos, en los últimos años la Argentina transitó del Consenso de Washington, asentado sobre la valorización financiera, al Consenso de los Commodities, basado en la exportación de bienes primarios a gran escala, entre ellos hidrocarburos (gas y petróleo), metales y minerales (cobre, oro, plata, estaño, bauxita, zinc), productos agrarios (maíz, soja y trigo), y biocombustibles.
“El modelo extractivista en Argentina no solo trae devastación ambiental sino también social y económica. Es la historia de América Latina, signada por un falso destino de ser proveedor de naturaleza para el norte global y que aceptamos pasivamente”, señaló Viale a esta Agencia.
Esta situación “hace que América Latina sea la región más desigual del planeta. La más pobre es África, otra región marcada por el extractivismo, no es casualidad; pero lo más desigual, donde hay más diferencia entre ricos y pobres es América Latina, y los mapas del extractivismo en nuestra región coinciden con los de la pobreza”.
Por este motivo, aseguró: “Estamos convencidos que hay que salir del modelo extractivista, del agronegocio, de la megaminería, de las figuras extremas, del petróleo, no solo por la cuestión netamente ambiental, sino también si queremos hacer una sociedad más justa e igualitaria, necesitamos repensar nuestros modelos de desarrollo, nuestras formas de vincularnos con los territorios, esa es la clave para poder juntar justicia social con justicia ecológica, que es el gran objetivo que tenemos”.(AIM)