NECROLOGICAS: El adiós a una amiga

Cuestan siempre las despedidas, y más, cuando se sabe es sin retorno, pero es allí, el momento de pensar en dicha persona, todo lo que hizo y recordarla en su accionar.

Me estoy refiriendo a la amiga Susana Purdié de Queiruga, que fue una persona activa, solidaria y al margen de ser madre y ocuparse de su hogar, supo colaborar con distintas Instituciones, y Asociaciones siempre dispuesta a extender su mano amiga.

Trabajó en Lalcec, en el Club de Jardinería, donde hacía bellezas con sus manos en ramos florales; en Rotary, y en Damas Patricias Argentinas, entidad benemérita.

Fue presidenta de dicha Asociación en el periodo del 2003 al 2008.

Entregó banderas en forma incesante a más de 20 Escuelas y Colegios y a distintas Instituciones, Clubes sociales, y justamente en la foto está en la catedral, con Inmigrantes Unidos y la señora Ofelia Larocca.

Además, entregó las ya tradicionales medallas a los mejores alumnos en Historia Argentina, contando con la colaboración de la Comisión de Damas que hoy tanto lamentan su partida.

Para cerrar, nos pareció apropiado terminar con un verso de otra dama Patricia, la señora Mercedes Goñi de Tiscornia, de su autoría titulado ‘‘AMIGAS’’ y dice así.

Que largas serían las horas,

que profundos los silencios

Y que pocos los recuerdos,

si la amistad no existiera.

El mañana sin esperas,

las sombras largas y tristes,

las lluvias interminables, si la amistad no existiera.

Los hijos que ya han partido,

los nietos que se nos van,

el alma estaría vacía,

si la amistad no existiera.

Por todo eso y mucho más, es mi reconocimiento a la amistad en sí misma que es un Don que Dios nos da.