Según manifestaron desde el establecimiento, “el proyectil agujereó el guardapolvo, la remera y alcanzó uno de los brazos del niño, pero unos compañeros lograron quitárselo ya que no había ingresado lo suficiente”.
El niño fue llevado al hospital por un familiar y estaría fuera de peligro. Personal policial secuestró la bala y las prendas de vestir.