Hemos preparado un menú que juega con la actualidad en tres platos. Un menú sin nudos ni complicaciones, pensado para todas las manos y todos los delantales. Un banquete concebido para alegrar los estómagos inquietos, relajar los espíritus y tener la fiesta en paz.
Receta de huevos Benedictine, un plato que consiste en dos mitades de muffin o pan inglés cubierto con jamón frito, espinacas salteadas, huevo escalfado y salsa holandesa.
Ingredientes (2 personas):
2 huevos
2 lonchas de jamón
60 g de espinacas frescas
agua
aceite de oliva virgen extra
sal
pimienta
Para la salsa holandesa:
3 yemas de huevo
200 g de mantequilla
1 copa de vino blanco o cava
sal
pimienta
vinagreta
Para el pan inglés:
1 huevo
180 g de harina
50 g de mantequilla
4 cucharadas de leche templada
una cucharadita de levadura
2 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
Elaboración de la receta de Huevos Benedictine:
Para la masa de los muffins, pon la leche templada en un bol y añade la levadura. Mezcla con la ayuda de una varilla y agrega un trozo de mantequilla para que se funda. Bate bien, incorpora un huevo y moja con un chorrito de aceite de oliva virgen extra sin dejar de batir. Añade la harina al bol y mezcla bien todo hasta conseguir una masa homogénea. Tapa con un trapo y deja que repose durante 1 hora.
Haz unas bolitas de masa con la mano, aplástalas un poco para darle forma y cocínalas en una sartén con un poco de aceite de oliva durante 10 minutos por un lado y 3-4 minutos por el otro.
Para la salsa holandesa, coloca las yemas en un bol, moja con el vino blanco y móntalas con la batidora eléctrica. Funde la mantequilla en una cazo y agrégala al bol poco a poco y sin dejar de batir. Bate el conjunto hasta conseguir una crema homogénea. Salpimienta, adereza con vinagreta y termina de mezclar bien.
Fríe el jamón en una sartén con un chorrito de aceite de oliva virgen extra. Limpia las espinacas cortando el tallo y pasándolas por agua. Retira el jamón de la sartén, incorpora las espinacas y salpimiéntalas. Cocínalas durante unos minutos.
Pon a hervir el agua con un poco de sal e introduce los huevos. Una vez dentro, baja el fuego para que no se rompan con el hervor.
Sirve los muffins en un plato y pon el jamón frito y las espinacas encima. Coloca el huevo escalfado y cubre con la salsa holandesa.
Receta de Solomillo en hojaldre
Karlos Arguiñano elabora una receta de solomillo de ternera con paté a las finas hierbas envuelto en hojaldre y acompañado de salsa de verduras y vino tinto, un plato para ocasiones especiales y Navidad.
Este plato es similar al solomillo Wellington pero se sirve en raciones individuales. Por este motivo es más fácil controlar el tiempo de cocción en el horno y su elaboración es más sencilla, perfecto para estrenarse antes de preparar el solomillo Wellington. Además, gracias a las raciones individuales, esta receta es ideal para preparar para dos personas.
Ingredientes (4 personas):
600 gr de solomillo de ternera
2 láminas de hojaldre
1 huevo
100 gr de paté a las finas hierbas
1 cebolla
1 zanahoria
1 puerro
3 dientes de ajo
1 trozo de apio
150 ml de vino tinto
30 gr de sésamo blanco y negro
15 gr de harina
aceite de oliva virgen extra
sal
pimienta
perejil
Elaboración de la receta de Solomillo en hojaldre:
Limpia el solomillo, corta 4 filetes gruesos y salpimiéntalos. Pon a calentar un chorrito de aceite en una sartén grande. Dóralos, retira y deja que se enfríen. Úntalos con el paté de finas hierbas y resérvalos.
Estira una lámina de hojaldre y córtala por la mitad de manera que te queden dos rectángulos. Corta 4 tiras finas de cada mitad y resérvalas. Coloca un solomillo en un extremo de cada trozo de hojaldre y tápalos de manera que queden perfectamente cubiertos. Sella los bordes con un tenedor y úntalos con huevo batido. Coloca las tiras en forma de aspa y úntalas con huevo batido. Decora la superficie con sésamo blanco y negro. Realiza la misma operación con la otra lámina de hojaldre de manera que queden los 4 solomillos envueltos. Colócalos en una bandeja de horno forrada con papel de horno y hornea a 200ºC durante 15 minutos.
Para la salsa, pela y pica los ajos, la cebolla, el puerro, la zanahoria y el apio en dados y ponlos a pochar en una cazuela con un chorrito de aceite. Sazona. Cuando la verdura esté dorada, agrega la harina y rehógala un poco. Vierte el vino tinto y dale un hervor. Vierte 300 ml de agua y mezcla bien. Deja reducir la salsa y tritúrala.
Sirve el solomillo y salsea. Decora con una ramita de perejil.
Receta de compota casera
Arguiñano elabora una compota casera tradicional con manzanas, orejones y uvas pasas y la acompaña con crujiente de caramelo y sésamo y fresas.
Ingredientes (2 personas):
2 manzanas verdes
2 manzanas rojas
80 gr de orejones
40 gr de uvas pasas
1 cáscara de naranja
1 cáscara de limón
100 gr de azúcar
100 ml de agua
1 rama de canela
2 clavos
2 anises estrellados
fresas para decorar
Para el crujiente:
50 gr de azúcar
15 gr de sésamo
Elaboración de la receta de Compota casera:
Pela y descorazona las manzanas. Córtalas en cuartos.
Para el almíbar, pon el agua y el azúcar en una cazuela a fuego medio. Incorpora las pieles y los corazones de las manzanas, las cáscaras de limón y de naranja, los clavos, los anises y la canela. Deja infusionar durante 25 minutos y cuela.
Introduce los orejones troceados y las uvas pasas en el almíbar. Cuécelos durante 5 minutos para que se hidraten. Añade los trozos de manzana y cocina la compota a fuego suave durante 25 minutos.
Para el crujiente, calienta el azúcar hasta que se caramelice. Agrega el sésamo y remueve. Pon el caramelo en pequeñas cantidades sobre un papel de horno y extiéndelo para hacer unas galletitas. Deja enfriar.
Sirve la compota con el crujiente y unas fresas.
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