Es parte de una poesía escrita por un niño.
Pensando en lo que dice, miremos si algo nos muestra que la primavera ha llegado también a nuestra vida, o si empecinadamente le cerramos la puerta, y nos quedamos con el frío y desolado invierno en nuestro interior.
A veces nos pasa, especialmente a los mayores, que insistimos en hablar y recordar los males, las enfermedades propias o de los otros, y no disfrutamos de esa primavera que Dios nos regala; con el agravante que desanimamos a los que están cerca de nosotros y nos escuchan.
No olvidemos, la primavera llega para todos, niños, jóvenes y mayores.
Tenemos una opción, mirar el cielo, las flores, disfrutar de su perfume y así podemos «reverdecer», sentirnos nuevos, o de lo contrario seguir mirándonos las puntas de los pies mientras caminamos, cayendo en lo viejo y rutinario de la nostalgia y la tristeza.
¡Vamos es primavera!, abramos de par en par las puertas y ventanas de nuestros hogares para que ella entre con fuerza vital,. y nos dibuje la más linda sonrisa.
Si dejamos que inunde nuestro corazón con su luz, nos sentiremos algo nuevos, más felices.
Por eso le decimos:
PRIMAVERA, DESPIERTA EL AMOR
QUE A VECES DUERME EN MI CORAZÓN
QUE DESDE ESTE DÍA
TENGA GANAS DE QUERER A TODOS.
VOS SABÉS CUANTA TERNURA
FALTA EN EL MUNDO.
INSPIRANOS A REVERDECER
NUESTROS MEJORES SENTIMIENTOS.
COMO HACÉS BROTAR LA VIDA
DE TRONCOS QUE PARECEN SECOS,
DE NOSOTROS HACÉ BROTAR
TODO LO BUENO, LO MEJOR
POR EL BIEN DE NUESTRA SOCIEDAD
Llegaste, al fin, primavera, no sabés cuanto te esperamos, ¡cuánto te necesitamos!
Solo vos podés renovar nuestra esperanza, a veces debilitada por medios que nos invaden con noticias negativas, como si fuera lo único qu existe.
Vos lo desmentís rotundamente; la Vida es más fuerte. El Amor siempre vence.
Y los jóvenes especialmente con su alegría, con su música, con esa fuerza interior que los conmueve en cada primavera, nos están diciendo, que la vida también se renueva y nos da la oportunidad de renacer y celebrarla con felicidad.